La palabra menopausia se refiere a la última menstruación de una mujer; sin embargo, se usa para referirse a la etapa en la vida de una mujer en que ya no tiene sangrados menstruales y su fertilidad se ha ido.
El climaterio es la etapa que se caracteriza por los cambios que experimenta la mujer antes, durante y después de la menopausia, y sucede cuando paulatinamente los ovarios dejan de producir estrógeno y progesterona, dos hormonas que rigen la capacidad reproductiva.
En la mayoría de las mujeres la menopausia suele ocurrir entre los 45 y los 55 años, y aunque cada mujer es diferente, por regla general el tránsito al climaterio toma un par de años. Una vez que ha pasado un año sin que se presente la menstruación se puede decir que una mujer está en esta etapa. Algunos de los síntomas podrán desaparecer alrededor de 5 años después, mientras que otros serán permanentes.
En la perimenopausia, que es la transición a la menopausia, y que generalmente sucede entre los 40 y 50 años, una mujer comenzará a tener menstruaciones irregulares, que pueden ser más abundantes o escasas que antes.
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Otros síntomas son bochornos, dificultad para concentrarse, descenso del impulso sexual o insomnio. En algunas mujeres también se pueden manifestar cambios vaginales, como resequedad y pérdida de flexibilidad.
Emocionalmente también pueden presentarse síntomas debido al descenso de los niveles de hormonas; una mujer puede sentir irritabilidad, cambios de humor, ansiedad o tristeza, que aunados a la idea errónea de que la menopausia es el fin de la juventud y el inicio de la vejez, pueden ir acompañados por sentimientos de baja autoestima y depresión.
Durante la perimenopausia y el climaterio es muy importante hacerse chequeos ginecológicos una vez al año. De esta manera, junto con el médico, se podrán conocer las ventajas y desventajas del tratamiento de sustitución hormonal y otros tratamientos para paliar los síntomas más desagradables de la menopausia.
Además, a partir de los 40 años, es necesario hacerse una mastografía anual para descartar problemas en los senos. El especialista también podrá solicitar un estudio de la tiroides, o una densitometría que le permitirá descartar pérdida de masa ósea. Si emocionalmente está teniendo dificultades que no le dejan estar contenta y seguir con su vida, es muy importante que consulte con un especialista, que le dé alternativas para vivir esta etapa plenamente.
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Es importante transitar a esta nueva etapa acompañada por el ginecólogo de confianza, quien podría solicitar estudios para evaluar el estado general de salud de la mujer y proponerle alternativas para minimizar los síntomas más incómodos y para prevenir problemas de salud asociados al descenso de los niveles hormonales.
